miércoles, septiembre 4

Una cubeta para guardar ilusiones


Tristeza terca,
que me lleva con ella hasta el fin de la luz,
y doy vuelta y desgarbado me regreso apagando las estrellas,
para dejar al cielo dormir en paz,
no sé qué hacer con este sentir,
tanta gente alrededor, tantas risas,
tanto pensar en ti,
tanta burla de la noche que se desvela conmigo,
y de regreso lo mismo, te pienso, te extraño,
y otra vez varado en tus manos, en las mías, sin ti,
quiero darle estos ojos rojizos al viento,
que se lleve colgado este abrigo de hiel,
quiero una cubeta para guardar ilusiones,
quiero unas alas rotas para llorar,
quiero abrazarme a tu ceguera,
quiero despertar abrazado a tu andar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario