martes, septiembre 28

Pastillas

Quiero unas pastillas de luna para el sueño eterno, una inyección de mar y una dosis de tu cintura temblando sobre mí,
quiero un masaje de estrellas en el cuello,
y una corona de galaxias para guiarme en mi viaje por tus piernas,
y tu espalda, y tus pies, y tus ojos, y tu caminar.

miércoles, septiembre 22

Luna de Girasoles

Lo sé de sobra. Sin embargo me gusta imaginar que estás a mi lado. Te cuento de mi día y te abro la puerta para que subas a mi casa segura de que estoy ahí para recibirte. Lo sé de sobra. Y de todas formas te escribo mis locuras imaginando que tus ojos son los primeros en saborearlas. Me gusta imaginar que ríes y suspiras con cada texto que encuentras por aquí, los lees y recuerdas algunos momentos que pasamos juntos. Lo sé de sobra. Y sin embargo deambulo por las calles de esta ciudad, para estar listo cuando vengas a mí. Sin embargo me gusta imaginar que un día el cielo se pinta de naranja; sin embargo me gusta imaginar tortugas volando y alacranes tomando el sol en traje de baño bajo un farol; sin embargo me gusta estar en la ventana mirando cangrejos bailarines que desfilan celebrando la revolución; sin embargo, me gusta imaginarte diciendo que me quieres; sin embargo, me gusta imaginar que la vida no está tan jodida como dicen los periódicos del corazón; sin embargo, lo sé de sobra, no todos los días se puede amanecer de colores en un cuento de hadas, si amor, lo sé, pero déjame gastar suspiros en ti, al cabo que mañana vuelvo a soñar tus pies y me brillarán los ojos para cantarte alguna canción; no hagas caso del ruido de estos ojos, no hagas caso de la maraña que se ha vuelto este corazón.

viernes, septiembre 10

Poema tú

Tan despacio dibujándote en la orilla del vaso, por la luz que refleja tu recuerdo,
la ventana detrás de mí con su aliento a ciudad,
yo delante suspirando mañana,
tan despacio alzándote la falda y tú dentro del vaso oliendo mi piel,
tu cara de colores y mis manos refugio,
mis ojos y tú, bailando,
la acera revuelta, las olas saltarinas de tu pelo,
y todo se refleja, suicida, en la orilla de una puerta,
donde al borde asoman tus pies, descalzos, andando, amor.