miércoles, julio 28

Mensaje a la Nación

Y dice así:

“Ordeno que en este pueblo nada valga tanto como la vida, entonces la verdad será lo que buscaremos tomados de las manos.
“Ordeno que cualquier día de la semana tenga la luminosa categoría del domingo.
“Ordeno que haya flores en todas las ventanas, que permanecerán abiertas para que llegue a las casas el verde canto de la primavera.
“Ordeno que el hombre confíe en el hombre como el día confía en la noche como la noche confía en la lluvia y la lluvia en el viento.
“Ordeno que los hombres se liberen de las mentiras y de la coraza del silencio para que puedan sentarse con sus hermanos a conversar la belleza y la justicia.
“Ordeno que recuerden al profeta Isaías: ‘el lobo y el cordero pastarán juntos, y la comida de ambos tendrá el mismo gusto a aurora’.
“Ordeno que todo pan tenga el sabor de la ternura.
“Ordeno que la alegría sea la única bandera del pueblo, y el amor su única arma.
“Desde este momento, el dinero tendrá fecha de vencimiento para que nadie pueda acumularlo para tener poder sobre sus hermanos.
“Una sola aristocracia: la del espíritu. Un solo privilegio: la inteligencia”.

Que viva el PERÚ!!!!!

*si la vida fuera así de sencilla...

martes, julio 27

Re/union

Deberían dejar que los besos hablen y organicen a los gobiernos. Sería cuestión nomás de no enviar gente tan estirada a tales reuniones, y juro que acaba en orgía... ¿Se imaginan? Reunión de la ONU acaba en fiesta, juerga y orgía... las negociaciones fueron tan plenas que se desarmó a Corea del Sur y los líderes Palestinos e Israelíes se la metieron doble al Bush. García dijo que con Pilar no se metan, pero la primera dama sigue desaparecida al igual que el Presidente de la República del Congo, ché negro, ojalá le quite la sonrizzzita de la jeta y la cambie por una risa de verdad.

Deberían dejar que los besos hablen y organicen a los gobiernos. Aunque fuera en el break de los 15 minutos, pero que tuvieran chance de apagar la luz, ponerles una película, y dejarlos manosear.

domingo, julio 25

Astrión

Debo quedarme acá, sin ti,
y mientras relamo mis heridas,
asomo a la ventana suroeste del laberinto buscando algún dejo de ti.
Ya que te has ido,
me desvanezco en sombras,
arranco tu nombre de cada pared,
pero son miles,
desvelo a la noche odiándote,
odiándonos,
percibo el día de tu regreso,
el viento,
tu sangre congelada,
y sospecho el día de mi muerte,
mi muerte real,
no tan dolosa como esta que ahora me mata,
me vuelve indeseable, translúcido,
y me grita al oído que todo fue un sueño:
Ariadna nunca fue tuya Asterión.
Día gris en la oficina, rectángulos y notas a pie de página,
sonidos de calle, sirenas, patrullas,
Teseo andando despacio,
entrando al edificio de la calle de Creta,
pisando seguro el primer escalón.

* Algo desganado con una extraña sensación en mi pecho, sera algún recuerdo ya vivido creo que me acostumbre a sus ojos y sus diferentes formas de hacerme reír y voltear la mirada escapando de su belleza *

domingo, julio 18

Real

Esto de cruzar los brazos, mirar al frente y suspirar frente a un pálido monitor, no es cuestión de todos los días. Pero de unas lunas para acá, tú estás del otro lado de la ventanita que parpadea, y hay momentos, como ahora, que alcanzo a sentir tus dedos enredándose a los míos, siento lo tibio de tus labios caminando por mi cuello y comparto el ardor que sientes en el pecho porqué de pronto tengo que decir tu nombre en voz alta para dejarte de extrañar. El estómago sigue un poco ocupado de tantas espirales de caricias que lo vuelven huracán, y yo, de brazos cruzados y manos temblorosas, cierro los ojos otra vez y me desayuno la mañana, para que el tiempo se vaya rápido y no sean estas ganas las que tenga encima de mi, sino tu rostro, mirándome, diciéndome: ya ves amor, te dije que era real....

martes, julio 13

Aun mas

No quiero que se me vaya el día sin dibujarte un millón de besos en el cielo, ¿has notado que el viaje nos parece aún eterno? Y apenas son seis años luz redescubriendo el universo, haciéndonos pasar por cosmonautas sin conocimientos previos de tecnología espacial, y que más da, si puedo estar meses perdido en el espacio entre tus manos y esa sonrisa, esa cordillera de sensaciones donde a veces sueño que caigo, y despierto con la sonrisa de idiota (la misma de siempre) creyendo que en cualquier momento la señorita Lula me gritará desde una esquina del escenario: ¡despierta baboso!, solo fue una broma para el show, y con aspavientos, aullando: ¡que pase la realidaaaaad!, y de la boca negra de aquella puerta, solo salga caminando un día normal, un día sin ti. Pero ya te digo, no quiero que se me vaya el cielo sin alzar la vista a tus ojos y rezar, por más días de nosotros, sillones con películas y salas de cine vacías para hacernos el amor. Más seis. Muchos más.

miércoles, julio 7

Dos años y días corriendo...

...de este blog. Quien sabe que tanto faltará en los días en que los dedos no dieron para más. Lo mucho que sobre, o lo poco que haga falta soñar, decir, gritar, escribir, sigue por ahí, en algún lado.

Gracias por seguir leyendo.

PD: Con los años, me doy cuenta que somos cada días más etéreos, más fantasmas, todos, nos guste o no, sobrepasamos la vida debajo de una sábana con dos hoyos por donde mirar; y solo queda alimentarse de besos, sueños, corajes, miedos, galletas de animalitos o simplemente de unas inmensas ganas de vivir.

lunes, julio 5

Ayer

Más besos que cualquier otra consideración. Treinta días después de las últimas letras, da lo mismo, sigo casi igual, con la inspiración atorada bajo las mismas ganas de archivar cada instante en esta torpe memoria, que se queden todos me digo, lo mismo al sonar de las campanas, la telenovela y el drama de andar en el centro mientras el viento nos quiere borrar a todos, hasta a los skaters y a los encuerados de las fotos de ayer. Bueno fuera, así seríamos solo tú y yo, y a seguir adelante, subirnos al bus de la mano, bajarnos por las escaleras enormes de caracol y andar de nuevo al año viejo, que se esfumaba, para dentro de poco venir el nuevo que pinta a cielo, a suspiro hondo, a sueño azulgrana, a las dizque ganas de ir a trabajar pero pensando en ratitos de hace un mes para acá. Y luego resulta que uno piensa en guardarse instantes en el archivo de la memoria que se no se borra, respaldar los mejores días en un disco que dure para siempre pintado de hoy, y así, me quedo con aquellos minutos de niño colgando en una barra afuera del zoológico de la gran ciudad, nada más, balanceándonos la sonrisa ahí tan cerca, tan distantes de lo real, ahí, ahí nada más.