martes, marzo 31

Por si vienes por aquí

Quise imaginarte aquí en silencio, con el brillo propio de una quimera que va y viene a mis pensamientos, y sucede, a cada vuelta, que deja un poco más de si en mí. Todavía me saben mis ojos a ti, a tu risa, imaginada, inesperada. Es exacta, la sensación, de quererte así. ¿Hasta cuándo me liberas estos besos? Me salgo de lo virtual, para posar las alas en el silencio de esta realidad sin tu voz, al menos hoy, ya sé que pronto estaré rasguñando a gritos hacia a ti, y tú, si quisieras,  hacia mí, y nosotros hacia un sol nuevo, dibujado a pedacitos de luna, dibujado a pedacitos de canción. No quiero suspirar para no asustar este momento, si me dices que es real, me quedo para siempre sintiendo lo que esta noche sucede en luces de colores para ti.

Por si vienes por aquí, dejo esta alma, llévatela a dormir al espacio donde cierras los ojos; por si vienes por aquí, dejo estas manos, llévatelas y sueña, que hoy fuimos un par de ventanas abiertas a lo que hace mucho se nos murió.

lunes, marzo 30

Pretensiones arteras

Todo lo que pretendo, a veces, es ponerle mi mundo a sus pies. Pero últimamente hay una especie de tormenta que se nos aparece cuando más reina la calma, esparce su viento por todos lados y aún con las ventanas arriba suele despeinarnos el alma y nuestro andar. Todo lo que se me ocurre, a veces, es crucificarla en mis besos y esperar tres días a que despierte enamorada de mí, mirarla mientras le flotan los sueños por su sonrisa de azul, soñando verde, mirando marrón; todo lo que pretendo, a veces, es matarla a sonrisas, a cariños sin piedad, a certeros abrazos por la espalda, a miradas lejanas de mi cursi amor; todo lo que pretendo, a veces, es estar cerquita de sus ojos y que me miren, cerquita de su voz y suspirar, cerquita de su alma, y cuando la sepa lejana, volverla a enamorar.


sábado, marzo 28

Sueño, recuerdo, memoria

Visito su ventana por que si.
Me atiborro de su imagen delicada,
pequeña,
dormida casi siempre para así mirarla más 
sin que sus ojos abiertos me derritan.
Y en el borde de aquellos vidrios que rompen paredes,
me descanso,
gárgola trémula,
para ser parte de algún sueño exquisito 
que se le escape por la frente.
Y tanto la miro,
que no logro hallarme en sus imaginaciones,
ni tantito,
aunque haya noches,
en que insista en llevar pinceles para arrojárselos 
a ver si pinta algo color a mí.
Pero nada.
Soy recuerdo,
en hojas blancas y letras torpes.
Soy memoria,
en montañas y mares,
tan lejos,
como su amor por mí.

¿te imaginas volver a intentarlo, y que esta vez salga bien?

jueves, marzo 26

Empoderada

Tú dices que no y tus ojos con un guiño me avisan que sí,
con un brillo extraño y medio indecente,
poniéndose de acuerdo con tus pies,
rogando por un beso tan tibio que les queme menos

que las ansias de ser medusas y hurgarle el fondo a la mar.

Tú dices que no y bostezas,
y mis sueños arando tu espalda gritan jodidamente que sí.



"ayer soñé que en tu interior había una ventana y entraba yo
era feliz, brillaba con tu luz..."

martes, marzo 24

Confesiones antes de dormir

Te quiero.
Odio el café demasiado caliente, y odio la espera de 5 minutos para que se empiece a enfriar.
Te extraño.
Odio que en mi celular no aparezcas mas, odio el calor de estos días y odio que la sábana siempre acabe hecha bolas a mis pies.
Estoy pensando en ti.
Odio los programas de telemercado que venden cosas absurdas, odio que no vendan besos tuyos que solo yo pueda comprar.
Me estoy acordando de tus lunares.
Odio la alarma del celular anunciando un nuevo día, odio tener el reloj adelantado y levantarme con el apuro de que ya es tarde.
Voy a dormirme con la esperanza de soñarte amor.
Odio estar tan lejos de ti, odio la espera de cerrar los ojos y ver tu imagen, odio mis pies que se niegan a salir corriendo a buscarte, odio los pedacitos de corazón que se mueren por ti, odio este nudo en la garganta, odio las lágrimas que empañan el monitor, odio la noche eterna, odio que mañana voy a seguir estando sin ti


(Día 9 de cuarentena Coronavirus)

sábado, marzo 21

Todo lo que hay que decir

Muy de vez en cuando, saltando de planeta en planeta, uno llega a toparse con seres como tú, y entonces, viajero terco, decido detenerme un rato para entenderte más (o al menos tratar de hacerlo), y acabar varado en tierras de sol, con un viento que le hace daño el frío y que se enamora de virtualidades, con ojos grandes mira la pantalla y se ríe y con los pies descalzos dibuja el utópico camino a seguir.

¿Hay que dar gracias al viento por detenerse de vez en cuando, y ser solo brisa tenue y sonrisas eternas? No lo sé, no creo que haya forma de agradecerlo, más que bañarse en él, y aprovechar cada roce de sus alas, antes que la mañana nos sorprenda, y la primer luz del sol nos convierta en gota de rocío, indefensa, cayendo, queriendo ser viento otra vez.

Todo lo que hay que decir, se nos ha escurrido de los labios en medio de las calles, tu voz, tus lentes, tus mojitos, tu brazo colgado del mío, tu risa y mis manos regalando letras, no hay forma de pagar las tardes, las noches, los sueños, y sobre todo, el vínculo, indescriptible, que nos lleva, siempre, de regreso, a compartir soledades.

Una vez dije:
El regreso a casa fue triste. No sabíamos que hacer, los planes se nos fueron esa noche en el parque de tu casa. Atrás la luz dormida. Los arboles nos saludaban entrando a nuestra realidad. El regreso a casa, casi sin llanto y en silencio, pues la música disfraza mi silencio: ¿qué más da el silencio, la música, si nuestras soledades se siguen acompañando?.

¿Alguna vez piensas en mi?

martes, marzo 17

tu Voz de Luna

Lo siento aquí dentro... es una voz.
Voz de ángel, mujer, diosa, estrella fugaz.
Si, de noche su voz suena en mí,
en mi cuerpo, mi sangre, mi vida,
en este dolor, en este difícil camino.

No la veo, pero su voz me grita voy a ti, y mi voz...
mi voz pide de rodillas ven...
mi voz pide de rodillas quédate...
mi voz pide de rodillas vuelve...
aunque nunca has estado aquí.

Noche, estrellas...

Su voz, misteriosa mujer, misteriosa silueta, diosa, amante,
que duerme... que vive...
que nace... en mí.

¿sabrá la Luna de todo esto?

lunes, marzo 16

Lejos, cerca

Hace rato me venía acordando de ti, y le platiqué a mis ojos como te presumía aquella noche que te vi por primera vez y tú eras una estrella de mar, de esas que les brillan los ojos para guiar torpes viajeros como yo, directito a la torpeza de mirarte harto y verte relucirte con este sol apagado nublado helado, en esta tarde dispuesta para verte, y tú tan lejos dibujando nubes de algodón y poniéndolas a mojar al cielo; verte caminar bajo el sol, hacer enojar a la luna y convertir en berrinches al vientecillo que nos aqueja, y ni quien te diga nada; y ahí vas, con tus pasos despacitos que se llevan mis oídos al cerca de imaginarte aquí. Como en foto. Borrosa la foto pero el momento agarrado y sin escape para siempre, abrazos entrelazos de utopías dispares pero brillosas igual, risas igual, tristeza acompañada que quiere ser tuya y nomás, nomás no se cae del árbol para que te la lleves para el camino; ya será de día, ya le platicaré a mis venas del calor que siente el corazón por ti, y a mis sueños, les dejo tus manos, para que se tejan una casita con duendes de colores, que se sepan mil cuentos, y mil abrazos de tu espalda, para no dejar de extrañarte más nunca, nunca más, como hoy. 


(Día 1 de cuarentena Coronavirus COVID-19)

domingo, marzo 15

Hasta morir

Estos besos no caben en un te quiero, así de simple, y tanto pensarte no cabe en un quizás, ni los sueños que sueño multiplicados por dos caben en letras y menos en espirales que se arrojen al vacío por amor, estas ganas no caben en mis ojos y estas ansias ya no caben en mi piel, este insomnio de noche ya no cabe en mi cama y estos golpes ya no caben en esta pared, tanta saliva ya no cabe en esta boca y tantas letras ya no caben en este aturdido ser. Mejor envío un sueño, que viaje de noche y se infiltre en tu ventana, un sueño que trepe por tu sabana y desde tu ombligo aprenda a caminar, un sueño que vacile un poco al pasar por tu cadera, un sueño donde te haga suspirar hasta caer al suelo, en una mañana de lunes, con música de blues sonando fuerte, con sabor a café caliente aún en la boca, con un "te extrañé" suspirado al oído, y con tantos besos que ya no nos caben, resueltos a rodar por nuestros cuerpos, resueltos a explotar en gritos secos, hasta morir.

apareciste y todas mis letras se iluminaron

viernes, marzo 13

Tiempo torcido

Ayer soñé que mañana me vería al espejo, y me veo sin ti, y me saben los labios a tu risa de hace varias noches y me saboreo tus lunares que besaría uno a uno antes de ir al trabajo, siento todavía en la piel la ternura de tu mirada por algún perro que acariciaste de madrugada, la luna desapareció y fui tan solo una imagen en un espejo que se iba a romper hace cinco minutos, pero que pasado mañana estuvo al tanto de que mi imagen y la tuya se mantuvieran fijas, atravesando un tiempo torcido de mañana al ayer, al hoy, a tu lejos, a mi cerca, a mis ganas de dormirme anoche pensando en verte una semana o dos atrás.

mi cueva es profunda pero aún brilla por tu luz 

martes, marzo 10

Imaginando sueños

Esta garganta arde,
estos ojos lloran
esta espera mata
y estos pies quieren caminar más... mucho más.

Voy al bosque, voy al mar, voy a volar encima de las nubes, voy a robarme un par de brillos para hacerme una luna que pueda colgar en mi ventana, verla cuando quiera y besarle los pies cada que me sobren besos, que de tantos que he perdido, no me canso de tantos que todavía tengo que recuperar, para dar.


domingo, marzo 8

aCuerdo

Todo aquello,
incluso las deshoras,
las esperas y el sillón amargado,
todas las ansias,
todos los finales de película,
los pies descalzos y los intentos de canción,
los pantalones de tela,
todos los miedos y todo lo que caminamos juntos,
las bancas de las plazas,
todos mis libros,
todos mis ojos en tu piel,
todas las miradas a la nada,
todos los post it,
las letras y la música,
los sueños y los domingos sin andar,
los despertares con desayuno en la mesa,
las canas, los sudores,
las deudas y todo lo que ganamos,
aquellos dibujos con lápiz,
aquellos regalos de corazón,
el mojito atrapado en vidrio,
el librito con frases cursis,
el vestido azul con puntos blancos,
todos los canales de la televisión,
las películas que no vimos,
el calor y el frío,
las ideas, las indecisiones,
los planes y el anillo roto,
la sed perdida,
los universos echados a perder,
la rutina nueva,
el sonido personalizado de texto,
las paredes y sus secretos,
el perfume que inventaríamos juntos,
y todas las bajadas y subidas a tu casa,
y lo que entra y sale de aquella vieja ilusión.

Todo se queda contigo, yo me llevo un lápiz medio roto, y un cuadernito en blanco, tengo ganas de dibujarme una historia nueva, tengo ganas de ponerle alas, tengo ganas de dibujarla mientras duerme tranquila y le beso la espalda para volver a empezar, para volver a rasparme las rodillas y los codos en este jodido camino. 

jueves, marzo 5

¿Dónde andarás?

Preguntarme eso me recuerda cierta canción, pero yo no quiero adivinar lo que andarás haciendo, más bien, me pregunto dónde andará tu risa mientras yo me empeño en imaginarme escucharla por calles de la ciudad.


En el momento exacto
en que te vuelva a ver,
te he echado tanto de menos,
sé que temblare.

lunes, marzo 2

Estos ojos

Dicen que los ojos nunca olvidan,
como elefantes,
a veces no duermen,
son adictos de tu imagen de perfil.
¿Por qué estos ojos se empeñan en seguir soñando?
si el corazón duele,
el alma llora,
y estos ojos, tercos, no hacen caso,
siguen mirando tu sonrisa.