Porque el tiempo sólo existe cuando hablas conmigo,
cuando me sueñas,
cuando gastas tres segundos para timbrarme.
Yo sonrío,
ahí el tiempo existe
porque tú existes todo el tiempo,
en mí.
Y si me explicas y no te entiendo,
si te entiendo y no lo entiendes,
si lo entiendes y me quieres
y me quieres y aún no entiendes porqué,
Seguimos siendo tú y yo
y esto no entiende de razones ni porqués.
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