domingo, agosto 1

Invisible

A veces, sin querer, ser invisible es una cualidad soportable,
otras, sin embargo, ser invisible es un tanto difícil de asimilar.

Ser invisible te permite caminar entre la fiesta y no involucrarte en pláticas no amenas,
ser invisible es entrar y salir y regresarte y volverte a meter sin ser visto jamás por algún odioso igual de invitado a la fiesta que tú,
ser invisible, es aquel ser que ronda las mesas e interfiere en pláticas que no son suyas cuando se harta de ser un ser invisible.

Luego hay momentos masivamente incómodos en que ser invisible resulta casi una proeza, casi imposible proeza, pero al fin y al cabo, eres invisible y no tuviste que cantar aquella canción ni hacer el brindis estilo vikingo con los restos de barbas (y babas) de los demás, si ni los conozco, y ser invisible, me arroja esa excelente comodidad.

Problemas vienen cuando se trata de ser visible, no siempre se tiene control y te estampas en toda tu visibilidad contra alguna pared descontrolada, eres visible y te ríes y hablas casi como los demás, pero entonces, aún te queda la manera de activar un algo que te hace ser invisible, un ser casi invisible para casi todos los demás.

A veces, sin querer, les digo, ser invisible es una cualidad soportable,
otras, sin embargo, ser invisible es un tanto difícil de asimilar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

juancito no andes tan invisible dejate ver uno de estos dias y sigue practicando mas chistes para la proxima salida A.

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