lunes, febrero 13

Viento

Había dicho que a veces soy simple espectador del viento y sus andanzas, pero torpe mentiroso me siento, lo soy siempre; viento danzante que con fondo blanco deja ver su lejanía en listones amarillos sobre la piel, lisa e incoherente, impávida y mordaz. Luego me aferro a sus alas en medio de la noche, abrazando fuerte y pidiendo: no te vayas por favor... quédate un minuto más, abrazo eterno. Y después nada más que su andar de lejos, su hasta mañana y un quizás que me imagino flotando asustadizo.
Dicen que no se puede capturar al viento, casi siempre acepto que es verdad, pero a veces, en la obscuridad, viendo ese perfil y esa risa burlona, me gusta pensar que alguna vez se deje atrapar; sé que me equivoco, pero me gusta irme a dormir con ese sueño en la punta de la lengua.

No hay comentarios:

Publicar un comentario